AFLORANDO DOLENCIAS.-

     La semana previa a una marathon es un tiempo donde aparecen todo tipo de dolores, molestias o malas sensaciones que hace mucho que no padecías, o nunca habías padecido. En eso estamos. Y durará hasta que esté en la línea de salida con otros miles de corredores. En ese momento dejan de aflorar todas las dolencias de golpe.

     El entrenamiento para la marathon de Viena ha sido flojo. Al principio me costaba estar un buen rato corriendo y cuando estaba entonado sufrí esa extraña lesión que me paró tres semanas en Marzo.

     En cualquier caso estaré en la línea de salida y el objetivo es llegar a la meta y hacerlo en buenas condiciones. En cuanto tiempo...Creo que estaré alrededor de las cuatro horas aunque seguramente algunos minutos por encima. Además va subiendo la probabilidad de lluvia para el domingo, según se acerca el día M lo que no será bueno. 

     Pero, como siempre, lo fundamental es practicar una vez más maraturismo, conociendo una ciudad que me dicen maravillosa y dedicar la mañana dominguera a reencontrarme un año después con Filipides y que me entregue una nueva medalla.

     Quiero dar las gracias a Sergio que desde Viena nos ha ido solucionando algunas dudas logísticas que han ido surgiendo. Así da gusto

     Tenemos ya reservado comidas para  un par de días, localizados bares cerveceros para el post, cafés, etc..., además de los sitios turísticos de obligada visita.

     La organización ha creado una aplicación llamada VCM (Vienna City Marathon) que permite tras una descarga muy sencilla, el seguimiento en vivo de un corredor sin más que introducir en la pestaña “live” el nombre.

     La próxima semana contaremos aquí lo que ha acontecido.